Entre la serie de castillos que podemos visitar una vez que nos encontramos en suelo jordano, uno de los más impresionantes es el denominado “Al-Qastal”, que lleva el mismo nombre de la Gobernación de Ammán a la que pertenece, en la zona nordeste del país, siendo el que más cerca se encuentra ubicado de la capital del mismo, Ammán, a sólo 25 kilómetros de esta, de entre todos los demás castillos del desierto del país.
Para llegar a este sitio debemos arribar desde la autopista que lleva al aeropuerto de Jordania, siendo el mismo fundado por los propios omeyas, aunque con la particularidad de que se trata, hasta el día de hoy, de una de las ciudades más antiguas y mejor conservadas del Cercano Oriente. En ella, sobresale especialmente el castillo conocido como el minarete de Qastal, ya que es el único que permanece del período omeya y uno de los más antiguos del mundo.
Según los historiadores, las evidencias encontradas en este lugar prueban que el complejo de Al Qastal fue construido originalmente por el califa Yazid bin Abd al-Malik entre los años 720 y 724. De hecho, el castillo cercano de Mushatta, que mantiene una arquitectura distinta, nunca fue terminado, y sus evidencias son más contundentes, y demuestran de alguna forma que el de Al-Qastal es aún más viejo.
Para los que conozcan de la historia del país, aún se exhiben algunas de las ruinas que demuestran que después de la caída de los omeyas fue utilizado por los abásidas. A la salida de éstos de aquel territorio, el mismo permaneció abandonado un tiempo y más tarde lo ocuparon los mamelucos y los ayubíes, que construyeron algunos otros edificios que aún hoy se conservan.
Vía: Wikipedia
Imagen: Renassaince Festival